Los árboles proporcionan material para los juegos o se convierten en un juego en sí mismos. ¿Quién no ha soñado alguna vez con una casita en un árbol? La mayoría de los niños disfruta sintiéndose acogido entre sus ramas, observar desde las alturas o compartir un rato con los pájaros de alrededor. Realizamos y adaptamos casitas en los árboles sin necesidad de dañar las raíces o las ramas.

En el proceso de construcción y durante el montaje, se ultiman las formas, techos y cuerdas, con el fin de proteger la propia naturaleza del árbol y la seguridad de los niños.

Todas las casitas son diseñadas y construidas de acuerdo a las normas europeas EN 1176. La inspección y certificación también se realiza in situ una vez terminado el trabajo.